Si hay algo que distingue a Tamaulipas es su sabor. De norte a sur, este estado se defiende con una gastronomía que se roba el corazón (y el hambre) de cualquiera. Sus platillos típicos no solo son deliciosos, también cuentan historias de tradición, familia y mucha identidad.
Carne asada al estilo tamaulipeco
Uno de los platillos que más presume Tamaulipas en todo el país. Aquí no es cualquier carne, se marina con naranja, cerveza, ajo y otros secretos que varían según la zona. Ya sea en reuniones familiares, partidos o cualquier festejo, si no hay carne asada, no hay evento.
Tamalitos de puerco y zacahuiles
Infaltables en diciembre o en cualquier fiesta tradicional. Los tamales del norte del estado suelen hacerse con carne de puerco bien sazonada y envueltos en hoja de maíz, mientras que en el sur se cocinan zacahuiles, una especie de tamal gigante que se cuece bajo tierra y que puede alimentar a toda una familia.
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Jaiba rellena, orgullo de la costa
Tampico se luce con este platillo que mezcla carne de jaiba con pan molido, especias y chiles. Se sirve en su propio caparazón y tiene el toque perfecto entre cremoso, picosito y crujiente. Un clásico de la costa que no decepciona.
Tacos de barbacoa y chiltepín
Para los que disfrutan del picante, los tacos de barbacoa con salsa roja, cebolla morada encurtida y chiltepín son una joya. Se encuentran desde puestos callejeros hasta fondas familiares donde cada receta es única y heredada de generación en generación.
Postres de tradición: dulces de leche y coyotas
Después del antojo salado, el toque dulce no puede faltar. Las glorias tamaulipecas, los dulces de leche y las coyotas rellenas de piloncillo son parte de la identidad del estado. Perfectos para acompañar con café de olla o champurrado.
La comida en Tamaulipas no solo alimenta el cuerpo, también el alma. Porque cada platillo lleva consigo el orgullo de una tierra rica en sabores, tradiciones y sazón.