Este verano, uno de los calzados más insospechados ha conquistado tanto las pasarelas internacionales como las calles de las grandes ciudades: la sandalia de pescador. De apariencia robusta, con tiras entrecruzadas, suela gruesa y un aire retro-andrógino, este diseño inspirado en los pescadores del Mediterráneo de principios del siglo XX vuelve a escena con fuerza.
Su retorno no es casual: responde al auge de lo "ugly chic" y a la necesidad de piezas funcionales y auténticas dentro del armario contemporáneo, durante años, este calzado permaneció en el cajón de lo utilitario. Sin embargo, firmas como Jil Sander y The Row lo han reinterpretado en clave de lujo minimalista, con acabados en cuero liso, líneas limpias y una paleta neutra.
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Su éxito radica en tres factores clave: comodidad, nostalgia y versatilidad. La suela flexible y el soporte que brinda la hacen ideal para largas caminatas o jornadas calurosas. Su estética vintage le otorga un aire nostálgico pero elegante, mientras que su estructura unisex y adaptable la convierte en un comodín que puede integrarse tanto en atuendos informales como sofisticados.
¿Cómo se lleva este verano?
Celebridades como Hailey Bieber ya la integran en sus looks con tops holgados, apostando por un aire relajado. También funciona con jeans anchos y camisetas básicas para quienes prefieren un estilo andrógino o con vestidos ligeros y minifaldas que juegan con el contraste masculino-femenino.
En 2025, la moda recupera esta pieza con una intención clara: rendir homenaje a la funcionalidad sin renunciar al estilo, tal como señalan editoriales especializadas en tendencias, el retorno de la sandalia de pescador coincide con un viraje hacia el diseño honesto y práctico, donde cada elemento del outfit tiene un propósito.